Al estar frente a frente, me dijo que los años me han sentado bien, que me veo mas maduro, mas guapo, mas hombre…yo que le podía decir, ¿que estaba aun mas bella que cuando la conocí?, no solo le dije que me pareció tan extrañamente reconfortante el escuchar su voz nuevamente…después de tanto y tantas cosas…le tome la mano y por costumbre tal vez la retiro y me la puso en la cara – estas enamorado-me dijo mientras me veía a los ojos –si, así es- y me puso los dedos en los labios y me pregunto -¿es el o ella?- tal vez mis ojos se abrieron de par en par..por su risa maliciosa lo pude saber – crees que no sabia que eres gay desde que te conocí?-, -supuse que lo sabrías en algún momento..o que eventualmente te darías cuenta, pero no que lo sabias desde que nos conocimos-, - no cabe duda que no importando sus preferencias ustedes los hombres siempre se creen mas listos que una-..ambos nos reímos, pero ella interrumpió las risas para decirme que le parecí fascinante desde que me vio, y que si me “sedujo” aquel día, yo la seduje a ella desde que la lleve a mi cama la primera vez, la segunda, la tercera , la cuarta y las subsecuentes fueron sexo, compañía, comprensión y todo eso que en su marido no encontraba en ese momento…..me dijo que he sido el mejor hombre con el que le ha sido infiel a su esposo, así de simple, así de fácil, también me dijo que hoy es feliz y de alguna forma encontré reconfortante que me dijera que si volviese a ser infiel lo seria solo conmigo.
Se volvió a ir como se fue tantas veces de mi departamento…dejándome con ese sabor dulce entre las manos, con ese tacto aterciopelado entre los labios..y con la incertidumbre de si algún día la volvería a ver……
Confieso esto porque es justo que nunca se me olvide una mujer así……por si no la vuelvo a ver.