UN LARGO FIN DE SEMANA (HISTORIAS MORELIANAS) Parte I

Los amigos, las mas de las veces en mi caso son esos seres en los que encuentro coincidencias pero que mas bien tienden a completarme, así que en estos días en que el corazón y la cabeza han estado trabajando horas extra para poner en buen resguardo a ese tipo conocido en el bajo mundo del hampa como Toño Fidalgo; decidí pues que ya venia siendo hora de reunirme con uno de esos amigos que por cosa de distancia hacia ya un rato que no veía, aparte de que no me había yo dado el tiempo de ir a visitarlo, así pues aprovechando la oportunidad y dos días libres de la oficina y casi de ultimo momento cabeza/corazón y los congojos decidieron que nos fuésemos a Morelia, Michoacán, para conocer, poner distancia entre casa de Iván y la mía ( vamos que he tenido ganas de correr para allá bastante la ultima semana) y pasar un buen rato con Jonathan a.k.a Kikis…el viaje comenzó mas o menos así.

PARA NO VIAJAR CON LA PANZA VACIA

A las 9.00 a.m estaba yo en la puerta de casa de Ariel ( ya leerán mas de el) para desayunar tal como lo habíamos acordado, una deliciosa tortilla española, pan, queso, café puertorriqueño y buena compañía fueron el despegue perfecto para a las 11:00 a.m. estar abordando el autobús que en 4 horas me tendría en tierras morelianas.

A las 3:30pm estaba yo de frente al buen Jonathan, así que con el hambre que me cargaba pues a comer en su casa, tuve la oportunidad de conocer a su mama y a su abuela. Dos mujeres de verdad excepcionales..y divertidas hasta la pared de enfrente.

DE VACACIONES (Y LISTO PARA SER SORPRENDIDO)

Y Como yo a esa hora ya estaba en “plan vacacional”, me paso como a los niños que acompañan a papa al trabajo, me fui con Jonathan y familia a su consultorio (son dentistas todos ellos) y ahí, justo ahí comenzó el viaje….me fui a una iglesia a hacer mi oración diaria que prometí hacer..cuando terminaba mi oración a favor del amor para mí..al voltear ya estaba al iglesia llenándose de trajes y vestidos largos, de algún modo no advertí la decoración de la iglesia dispuesta para una boda..me reí hacia mis adentros, tal vez una señal divina de que lo que pedí se me dará…no lo sé, simplemente ya no puede o mas bien o quise retirarme de la boda, así que me senté en las bancas de atrás y seguí toda la ceremonia..Aquí unas fotos de los hoy esposos!

Después de la boda y obviamente felicitar a los novios ( que descarado no?), me regrese al consultorio con Jonathan para felizmente irnos por un cafecito a uno de los locales que Starbucks tiene en Morelia….simplemente un café para pubertos, o de plano los que les de pereza pagar el internet inalámbrico…esta bien!! Algún otro que el de su casa es lento y mejor se toma un cafecito y usa un internet de alta velocidad (aja si como no!)….pero acto terminado nuestro café regresamos a casa a ponernos guapos (jajajajajaja) para salir a recorrer Morelia de Noche….