MARTES 13

Martes 13, la verdad no me percate de la fecha hasta que tuve el documento frente a mí.
De pronto quise creer que era la fecha lo que me produjo el escalofrío en la espalda, la molestia en la garganta y el leve temblor en la mano…pero al revisar el papel frente a mi, me di cuenta de que era la orden para poner en la cárcel a alguien por lo menos 3 años sin la prerrogativa de revisión de sentencia por comportamiento lo que me hizo tal efecto.

Me confieso culpable, he firmado ese tipo de documentos mas de una decena de veces, siempre bajo las mismas premisas, convencido de la culpabilidad de quien sea que su nombre vaya inscrito y de que la cárcel es el único medio posible ya, para hacerle pagar.

Haciendo acopio de equilibrio (en más de un sentido) firme. De pronto caí en cuenta en cuan largo, aunque solo tenga 24 horas podia llegar a ser un martes 13.

Martes 13, el mismo café y por ende la misma zona, sin comer y con el estomago en un puño, de pronto me tope con sus ojos verdes y su cabello entrecano, su voz casi correspondía a lo que en segundos configure debería de ser…y mi mirada un poco pesada le advirtió de mi presencia…minutos mas tarde estábamos platicando, minutos mas tarde sentados tomando té en un lugar diferente…minutos mas tarde compartíamos algunas canciones de viva voz, minutos mas tarde compartimos un pedazo de pastel, minutos mas tarde confesábamos algunos tropiezos y de cómo pudimos vencerlos, de lo inusual que era encontrar a alguien como el y como yo en un lugar tan común…minutos mas tarde nos abrazamos, minutos mas tarde acariciábamos nuestras manos, minutos mas tarde nos hicimos la pequeña promesa de volver avernos en no mas de 24 horas..y solo unos minutos mas tarde nos hablábamos acostados en la cama, cada quien en la suya..pero muy cerca…y aún era martes 13